Otra vez, ese sueño lleno de enigmas. Otra vez, ese despertar transpirado. Otra vez, esa intrigante puerta llamándolo provocandolo. Persuadiéndolo a abrirla. ¿Que habría detrás de esa puerta? ¿Quien? Presentía que algo esencial para su Existencia estaba cruzando esa puerta. Pero, ¿y si lo aguardaba era algo aterrador, maligno? ¿como saber?
Se acomodó y tuvo ganas de fumar. pero le habían prohibido el cigarrillo. Lástima, Ayudaba a meditar. Habia leído que los sueños eran mensajes cifrados del inconsciente que expresaba en símbolos algunos de los traumas sufridos en la infancia. Entonces, la puerta podía ser el símbolo de algo que cuando chico había deseado atravesar. Si, posiblemente era un símbolo, por que no recordaba ninguna puerta como esa en su niñez. Tampoco en el resto de su vida. ¿donde estaría esa puerta? Si lograba encontrarla, no dudaría. Si la hallaba, la abriría con decisión y vería-por-fin- que escondía.
Satisfecho con su resolución, giró dentro del ataúd y siguió durmiendo.
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